La Trilogía de la Seguridad e Higiene del Trabajo
Autor: José BRUQUE MARTRUS
Si se analiza el desarrollo que ha tenido la Seguridad e Higiene del Trabajo en un periodo de cuarenta años atrás en el Ecuador, tenemos que concluir que poco a nada se ha logrado. El esfuerzo inicial estuvo orientado a controlar las condiciones ambientales, estamos seguros que a la fecha se mantiene un adecuado control de esas condiciones, pero lo que nos proponemos en el presente artículo, no es controlar esas condiciones ambientales, sino a concientizar en materia de Seguridad e Higiene del Trabajo desde un punto más amplio, en un problema relacionado con las personas, cuya finalidad es aprender a conocerlas y saber cómo poner bajo control el comportamiento humano.
Seguridad, productividad y Recursos Humanos, son una trilogía que nos obliga a meditar profundamente a quienes por una u otra razón estamos inmersos en la búsqueda de esos logros, si consideramos que el éxito de muchos países y la investigación moderna apuntan a un factor común, para ese éxito: los Recursos Humanos. ¿Esto por qué?, porque no solamente el desarrollo industrial alcanzado por los países desarrollados en los últimos cien años, se fundamenta en la inversión de capitales y tecnología; estos dos factores por si solos no hubiesen dado el efecto logrado, de no mediar la conducta y el comportamiento humano.
Las definiciones que sobre Seguridad existen, desde el punto de vista técnico deben seguir estableciéndose.
Actualmente por los conceptos doctrinarios antes indicados, debemos orientar nuestra acción a pensar a la Seguridad como una Administradora de Recursos, como lo plantean algunos estudiosos de la materia modernamente, pues aquello permite desde el punto de vista de los objetivos gerenciales a considerar a esta doctrina como un componente del trabajo.
Para facilitar la comprensión de este criterio, de la etapa del comportamiento humano, tenemos que admitir que la seguridad ha pasado por la ingeniería, donde los esfuerzos más serios fueron orientados a mejorar las condiciones de trabajo; la etapa de la administración, caracterizada por un acercamiento al desarrollo de la prevención, para la cual se han establecido métodos, sistemas y programas para determinar las causas reales de los accidentes y los costos de los mismos. Como consecuencia de la evolución constante a que está sometida esta disciplina, más encontramos actualmente con la etapa del comportamiento humano, donde todo el esfuerzo se vuelca a conocer más y mejor la conducta humana y ampliar las técnicas de motivación. Camino que se estima, como exitoso, porque establece una verdadera armonización o trilogía como hemos expresado, de productividad, seguridad y calidad.
Corresponde a los señores supervisores, aceptando el valor que tiene la teoría, transformarla en un enfoque practico, que garantice conceptualmente los logros que la teoría describe, por ello analicemos algunos aspectos relevantes que debe tener en cuenta un supervisor cuando debe aplicar la teoría de la Seguridad.
Debe tener en cuenta, que con el enfoque moderno que le hemos dado a la Seguridad, ésta pasa a ser UNA HERRAMIENTA DE GESTIÓN, definitivamente formando parte de las operaciones de una empresa y permite obtener resultados integrales, que garantizan la SUPERVIVENCIA DE LA ORGANIZACIÓN, pero, fundamentalmente permitiendo que las personas tengan una clara conciencia de estar aportando a esos resultados y consecuentemente su desarrollo personal.
Debe ir, a la búsqueda de obtener la integración del ser humano al sistema y hacerlo actuar con los demás elementos de la organización, porque solamente así será posible que el trabajador comprenda la trascendencia que el recurso humano tiene en el proceso productivo y consecuentemente aprecie la importancia que tiene la disciplina que contribuye a su protección y desarrollo.
Tiene que realizar un enfoque sistemático y generar un esquema que lo lleve a la optimatización del funcionamiento total de la actividad que realizan, para de esta forma conseguir garantizar la protección de la personas y por ende el funcionamiento optimo global.
Diseñar un programa de seguridad, que si bien pueda ser cuestionable en algún momento, pueda garantizar con un alto grado de confiabilidad el éxito en materia de Seguridad dentro de la organización; programa que debe estar orientado a las personas y sus directrices, dirigidas a motivar, entrenar, persuadir e involucrar a los trabajadores, para que comprendan que son parte importante e integrantes de un programa total.
Debe organizar el tiempo, para usarlo eficazmente, ya que el mismo no lo va a encontrar en su billetera, ni tampoco en su cuenta corriente, no podrá pedirlo prestado, no podrá trabajar con más ahínco, porque no podrá extenderlo más; y, por supuesto, tampoco podrá detenerlo. Es más, todo lo que podría hacer con él mismo, es aprovecharlo en la mejor forma posible, haciéndose las siguientes preguntas, por ejemplo:
¿Tiene usted suficiente tiempo todas las semanas, para hacer las cosas que quiere?
¿Puede usted, decir con sinceridad, que logra hacer usted más ahora, que hace seis meses?
¿Es usted una persona decidida?
¿Puede usted decir no a las demandas injustas de su tiempo?
Corresponde también al supervisor, delegar tareas, lo cual es muy importante para el eficiente funcionamiento de un grupo de trabajo, sin embargo, con frecuencia este útil mecanismo no se pone en práctica por impedirlo, poderosas barreras psicológicas.
Unas veces, es el propio supervisor que se resiste a delegar parte de sus funciones, ofreciendo para ello una variedad de razones que aparentemente justifican su actitud; otras veces, son los subordinados quienes se muestran renuentes a asumir las nuevas responsabilidades para pensar que de hacerlo, podrían perder el prestigio adquirido. Pero, lo correcto es que, ni uno ni otro están en lo cierto.
La verdad es que, ante una multiplicidad de responsabilidades que le corresponde al supervisor, no es fácil desempeñarse eficientemente si no delega algunas de sus tareas en los colaboradores que tenga más confianza, y aquellos que no lo admiten están perdiendo la oportunidad de progresar; por ello, resulta muy conveniente para el supervisor adiestrar permanentemente a su personal y delegar atribuciones puesto que, con ello se consigue que respondan mucho más de lo esperado, este adiestramiento tiene que ser público y no en secreto, estimule a su personal diciéndole, que usted espera que aprendan nuevas responsabilidades y se hagan cargo de ellas; corresponde al supervisor, mantenerse alerta a nuevas oportunidades de tareas que sean permitidas delegarlos y concientice en ellos la oportunidad de aceptar una charla, de concurrir a seminarios, en fin, a toda oportunidad que le permitan acrecentar más y mejores conocimientos; hágales comprender que usted, está dispuesto a emplear parte de su tiempo con ellos y que la compañía no va a escatimar dinero en su formación, concurra con ellos a reuniones de trabajo, si usted considera que son expertos en determinadas tareas, o simplemente puede intuir que tienen interés en ellas; finalmente, sea comprensivo con sus errores y tolere los mismos dentro del marco de lo previsible, cree confianza, haciéndoles comprender que no debe inhibirse por ello, sino corregirlos con la mayor celeridad posible.
Finalmente, debe conocer el arte de la diplomacia, que no es otra cosa que lograr que la gente vea las cosas como nosotros las vemos, para ello utilice el ejemplo de Kari Benz.
Por todas las razones, las personas que actúan como SUPERVISOR, tiene la obligación de conocer cada uno de los trabajos que el grupo a su cargo realiza, y además conocer perfectamente las disposiciones que regulan la forma de ejecutarlo bien y en FORMA SEGURA, tanto para el equipo como para el personal.
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